Para la aplicación de materiales especiales
Con unos resultados óptimos es necesario tener una superficie exenta de suciedad, contaminación de productos nocivos o antiguos revestimientos, así como una superficie adherente que garantice la durabilidad de los materiales a aplicar.
Esto se consigue mediante la preparación de superficies mediante medios mecánicos o manuales; utilizando los equipos necesarios de personal cualificado y maquinaria de última generación, como limpieza con chorro de arena, granallado, fresado-escarificado o diamantado para el rebaje y pulido de hormigón. El procedimiento dependerá del tipo de trabajo a realizar.
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La empresa Serviarnau, tiene en su propiedad todo tipo de máquinas destinadas a la preparación de superficies, teniendo total autonomía en sus trabajos, sin la necesidad de arrendamientos que encarecen los costes de los trabajos.
La preparación del suelo consiste en eliminar el recubrimiento existente (adhesivo, pintura, relleno, epoxy, poliuretano, autonivelantes) antes de colocar un recubrimiento nuevo.
El conocimiento del suelo antes de comenzar los trabajos, siempre es una obligación y un factor importante a la hora de escoger el tipo de preparación. Cada suelo es distinto. Un suelo puede ser de hormigón duro o blando.
Los ejemplos de suelos duros incluyen granito, cuarzo, corindón y hormigones con áridos duros (silicio). Los ejemplos de hormigón blando incluyen suelos de calidad pobre u hormigón blando (calizo)